El pasado 3 de abril propusimos un reto de lectura para amenizar la cuarentena. Estábamos en víspera de unas atípicas vacaciones, que íbamos a tener que pasar encerrados en casa. Es incierto el panorama de la industria cultural en esta crisis porque no produce bienes de primera necesidad, pero ¿Cómo habría sido nuestro confinamiento sin lectura, sin música, sin cine? Gracias a los productos de la cultura podemos sobrevivir en un lugar reducido, porque el espacio de la mente es infinito. Incluso las condiciones de aislamiento y tranquilidad son las idóneas para disfrutar mejor de un buen libro.
Por eso, pensamos que era el momento de sacar el lado de biblioteca pública que todos llevamos dentro, y lanzarnos a la experiencia de un club de lectura virtual en torno a “Aita Tettauen”, uno de los Episodios nacionales de Benito Pérez Galdós, cuyo centenario se celebra en 2020. Cuando el aislamiento se impone, hagamos del libro un motivo de encuentro. En este post os queremos contar brevemente cómo ha sido nuestra experiencia en estos días.
La estrategia se desarrolló en dos frentes: blog y redes sociales. El blog quedaba para las guías de lectura (5 en total), que precisaban de una lectura más tranquila sin la constante estimulación de las redes. En Facebook, Twitter e Instagram, publicamos vídeos e imágenes para enriquecer la lectura y animar a la conversación.
Para rematar el reto, el pasado domingo 19, realizamos una tertulia virtual con los lectores de Aita Tettauen, en la plataforma Google Meet. La idea era redactar entre todos los participantes la reseña del libro. Aunque hubo menos asistencia de lo que nos habría gustado, fue tremendamente enriquecedor porque Galdós da para mucho.
Algunos asistentes reconocieron haber tenido la impresión previa de que la lectura de los Episodios nacionales iba a resultar aburrida. Ha sido una sorpresa descubrir la especial forma de hacer historia de Galdós, cómo los acontecimientos se mezclan con la trama novelesca para hacer adictiva la lectura.
También se habló de la interpretación política de la campaña de África, que permitió a O’Donnell distraer la atención de la ciudadanía de otros problemas y concentrar poder. Tal y como algunos líderes mundiales, afirmaba un contertulio, llevan a cabo a día de hoy.
Se habló de la actualidad del mensaje de Galdós más de cien años después, la facilidad con la que muchos de sus pasajes se pueden extrapolar a la realidad actual. Nada mejor que las palabras de Márquez Villanueva para resumir nuestra impresión: “A pesar de no tratarse de una obra científica, los episodios son una reflexión creadora del Siglo XIX español, no superada por ninguna historia académica “.
Salió a colación la polémica reciente acerca del valor literario de Galdós, y el menosprecio hacia él por las corrientes literarias más vanguardistas. Puede que otros autores le superen en virtuosismo literario, pero eso no le quita méritos. Los gustos cambian, las tendencias literarias evolucionan, pero lo cierto es que la sensibilidad y los temas galdosianos aún nos llegan con intensidad. También hablamos del mensaje pacifista de la novela y de la visión tan moderna de Galdós sobre la diversidad religiosa y cultural entre los pueblos.
Aunque esperábamos más comentarios en las redes, hemos constatado con alegría que ha tenido mucho seguimiento, pues las interacciones se han incrementado notablemente durante los días del reto. También nos han llegado muchos agradecimientos y felicitaciones por diversas vías.
Por todo ello, podemos afirmar que el reto lector ha sido una experiencia fantástica, con la que hemos aprendido muchísimo, y que nos ha permitido sentirnos útiles en estos momentos de incertidumbre. ¿Qué tal si montamos otro reto? Los lectores diréis…
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